Por el contacto de la iglesia luterana ELCA con la iglesia luterana costarricense ILCO surgio la idea de ir a compartir nuestro proyecto musical familiar a Estados Unidos. Buscando personas interesadas y arriesgandonos decidimos este año en julio ir a Ashville, Atlanta, Hickory..... Esos eran los nombres de los lugares con los que fueron abriendose las puertas y el 2 de julio estuvimos sentados ya en un avión rumbo a Atlanta. Aunque la primera estación fue en casa de la tia América en Covington, ya pronto partimos en bus hacia Charlotte (lo que fue culturalmente toda una experiencia), de donde nos recogieron para llevarnos a Hickory, a la casa de la familia de Florence and Paul Weber (director de coro que meses antes había estado en Costa Rica con su coro para dar talleres y conciertos). Era el 4 de julio, dia de la independencia, que celebramos con la familia y algunos integrantes del coro.
Al dia siguiente participamos con música en dos misas y dirigimos un espacio abierto de diálogo sobre nuestro trabajo de "Arte por la vida" con la ILCO en Costa Rica. Esa misma tarde partimos hacia Ashville, donde se encuentra el campamento LUTHERIGE para iniciar la semana de música que anualmente se celebra en el campamento. En este campamento dimos talleres para los grupos de las diferentes edades llevandolos a un "viaje por centroamerica", contandoles un poco sobre los países, los ritmos, las costumbres y hasta algunas palabras en español que se pueden encontrar al irse por tierra desde Estados Unidos hasta Costa Rica. Además de dar los talleres pudimos participar en los coros y las agrupaciones de musica del campamento y dar un concierto mas amplio en el que también pudimos contar algunas cosas sobre nuestro trabajo "Arte por la vida" (el arte como instrumento para la transformación social). El fin de semana tocamos dos misas mas en una iglesia de un pueblo cercano al campamento, de las que una era en español por la alta cantidad de latinos que tenia esta comunidad.
La segunda semana en Lutherige continuamos dando talleres a los diferentes grupos, siendo esta semana de campamento integrando personas con capacidades especiales ("Summershine- program") ; fue una experiencia distinta, pero de igual forma muy enriquecedora.
A finales de esa semana volvimos a Atlanta, esta vez a una conferencia con talleres titulada "Worship Jubilee", un encuentro de cada 2 años de musicos y pastores luteranos, para la que Paul Weber nos invitó. Fueron 4 días llenos de talleres y conversatorios con personas muy distintas de todo Estados Unidos con propuestas nuevas sobre el como debe ser una iglesia en la actualidad y que se debe hacer para lograrlo. En esos dias tuvimos la oportunidad de visitar tambien la iglesia de Ebenezer y el museo de los derechos humanos y civiles siguiendole así las huellas a Martin Luther King Jr. En el encuentro habia variedad de musica: desde los spirituals hasta el rock y música de órgano, propuestas para todos los sentidos del cuerpo, y nos encontramos de igual manera con una gran diversidad de personas muy especiales.
Con esta semana también terminó nuestra estancia en Estados Unidos y la experiencia tan distinta del estar en el pais en el que no habiamos imaginado estar, con todas sus contradicciones, sus cosas terribles y sus cosas hermosas (parecido a cualquier otro país), aprendiendo a observar de otro modo, abriendonos, dejando los prejuicios de lado para comprender mejor.